ADIF Alta Velocidad ha adjudicado a WSP Spain, en UTE con CEMOSA, los servicios de Consultoría y Asistencia Técnica para la redacción del proyecto de construcción de la plataforma de Alta Velocidad entre Manzanos e Iruña de Oca, uno de los cinco segmentos que componen el tramo Burgos-Vitoria: el nudo de conexión que enlazará Madrid con el País Vasco y la frontera francesa.
La Línea Madrid-País Vasco-Frontera Francesa es uno de los ejes ferroviarios más relevantes de entre los que están pendientes de incorporarse a la red de Alta Velocidad en España. Se trata del corredor que conectará las tres capitales vascas (Bilbao, San Sebastián y Vitoria) con la red de Alta Velocidad del resto del país, enlazando también con Francia a través de la ‘Y vasca’.
WSP Spain desarrollará el diseño final del segmento Manzanos-Iruña de Oca, con una longitud aproximada de 13,7 km. El tramo discurre por las provincias de Álava y Burgos. Su trazado avanza en paralelo al río Zadorra y, aunque recorre en su mayor parte terrenos llanos destinados al cultivo, también atraviesa zonas de orografía compleja, como los montes de Mochado, Cuesta Solana y El Berrozal. Por tanto, además de su importancia estratégica para la conexión de Alta Velocidad entre Madrid, País Vasco y Francia, para ADIF es clave la integración ambiental del proyecto.
El principal reto técnico de esta infraestructura es precisamente el contexto geológico y geotécnico, especialmente a nivel hidrogeológico. En el caso del segmento Manzanos-Iruña de Oca, uno de los más complejos del AVE Burgos-Vitoria, se prevé la construcción de una decena de viaductos y dos túneles relevantes, el de Manzanos y el de La Puebla, para reducir al máximo el impacto medioambiental del proyecto.