Los agentes ambientales extremos ligados al cambio climático ocasionan daños sobre las infraestructuras que incrementan los costes y reducen sus ingresos, constituyendo un desafío para los operadores de infraestructuras de cara a la planificación y gestión sostenible de sus activos.
El Instituto de Hidráulica Ambiental de Cantabria y WSP Spain han colaborado para desarrollar una aplicación para el “International Finance Corporation (IFC) sectorial adaptation project” del banco mundial, que evalúa el impacto técnico y económico de los agentes climáticos sobre carreteras y aeropuertos. El objetivo principal del proyecto ha sido desarrollar una herramienta (denominada “Climate Risk Management Screening Tool”, de manera simplificada “ST”) que permita a los usuarios de IFC determinar, de una manera relativamente sencilla, el nivel de riesgo de una carretera/aeropuerto, en función de la información específica del proyecto y del clima. Para ello, el riesgo climático se basa en indicadores financieros que evalúan las consecuencias para diferentes escenarios de cambio climático y distintos años horizonte. De manera complementaria, la herramienta sugiere posibles medidas correctoras del daño o de adaptación al cambio climático, que pueden aplicarse sobre las infraestructuras con el objetivo de hacerla más resiliente frente a los agentes ambientales, ofreciendo la oportunidad de comparar los riesgos y costes esperables sobre la infraestructura en su estado inicial y tras la aplicación de este tipo de medidas, así como aconsejar acerca del año en que la aplicación de estas medidas se considera recomendable. Según los casos, las medidas recomendables pueden tener un carácter local (protección de determinadas zonas de las obras de tierras o estructuras o refuerzo de algunos elementos de equipamiento…) o aconsejar, en los casos más desfavorables, una revisión de la planificación general de la red en la que se ubica la infraestructura para evitar zonas inundables, por ejemplo.
Para lograr este objetivo, la herramienta desarrollada fue implementada en una aplicación web con cobertura global y de aplicación a inversiones nuevas o existentes, que proporciona el nivel de riesgo para dos escenarios de cambio climático (RCP4.5 y RCP8.5) y tres horizontes temporales (2025, 2050 y 2100).