Ahora la pandemia ha marcado un punto de inflexión, tanto por la contracción económica global, que dibuja un futuro incierto, como por la anunciada inyección de inversión pública. Los fondos europeos representan una oportunidad única para impulsar la movilidad en España hacia un modelo más sostenible en torno al ferrocarril, lo que a su vez consolidará a la industria ferroviaria española en su posición de liderazgo internacional. Un escenario para el que WSP Spain lleva años preparándose a través de la incorporación de la sostenibilidad como elemento fundamental en los sistemas ferroviarios que diseña en todo el mundo. “Los sistemas ferroviarios desempeñan un papel clave en el futuro del transporte moderno. Ofrecen soluciones sostenibles que reducen las emisiones de carbono, crean una mayor movilidad con mayor eficiencia energética y proporcionan beneficios económicos a largo plazo”, explica el vicepresidente de la multinacional en España, Mario Pérez.
Conectar en lugar de atravesar. Un concepto que WSP Spain aplica en todas las infraestructuras de transporte que diseña. En Oriente Medio, a través de megaproyectos como el Etihad Rail (red ferroviaria de 1.200 kilómetros que conectará los siete Emiratos Árabes) o el Metro de Riad, capital de Arabia Saudí. En Centroamérica, donde el Tren Maya unirá los principales centros turísticos de México y sus comunidades rurales, abriendo oportunidades al comercio y al desarrollo social. En las líneas de alta velocidad que vertebran el estado de California o que comunican las ciudades de Dallas y Houston. En Chile, donde WSP Spain ha redactado junto a INECO la nueva normativa técnica ferroviaria de la Empresa de los Ferrocarriles del Estado. En los países nórdicos, a través de proyectos urbanos como la extensión de la ‘Blue line’ del Metro de Estocolmo. O en Europa del Este, en infraestructuras como la nueva línea ferroviaria que comunicará Kicevo (Macedonia) con Albania.
Su experiencia internacional, tras más de 30 años de presencia en el extranjero, ha convertido a WSP Spain en socio preferente de las principales constructoras españolas. “Compartimos ADN con ellas”, explica su vicepresidente, Mario Pérez. “Compartimos una misma cultura de ingeniería y estamos habituados a competir a su lado por los proyectos internacionales más importantes. Saben que pueden ir a cualquier país del mundo junto a ingenieros españoles de WSP y, al mismo tiempo, contar con el apoyo de un equipo local de la misma compañía". Ser locales en cualquier parte del mundo. Ésa es una de las principales ventajas competitivas de trabajar a escala internacional junto a una multinacional de ingeniería.
Antes de que la industria ferroviaria española fuera demandada en los cinco continentes, las empresas del sector ganaron experiencia y conocimiento en su propio terreno. Así, WSP Spain ha diseñado más de 250 kilómetros de Alta Velocidad en España y ha revisado y certificado otros 500. Una experiencia que le ha abierto las puertas del mercado internacional y le ha permitido perfeccionar una herramienta fundamental para el éxito de la industria ferroviaria española en el mundo: la ingeniería de valor. Gracias a su habilidad para ofrecer soluciones de ingeniería imaginativas que, sin merma en la funcionalidad, conllevan menos riesgos y costes más bajos, la alianza entre WSP Spain y las constructoras de referencia en España ha logrado presentar las ofertas más competitivas en el mercado internacional y, por tanto, liderar los mayores proyectos ferroviarios del planeta en la última década.
Ahora es el momento de aprovechar la reputación y experiencia de la ingeniería ferroviaria española para ser también líderes internacionales en movilidad sostenible, un modelo de transporte que pasa sin duda por el uso del ferrocarril como elemento vertebrador. Las cifras son indiscutibles: para transportar a 1.000 personas se necesitan entre 250 y 1.000 automóviles, 15 autobuses o un tren de ocho vagones.
Para WSP Spain, la movilidad sostenible pasa por la creación de sistemas multimodales que aprovechen al máximo la eficiencia energética y espacial del ferrocarril y permitan conectar el tren con el resto de medios de transporte de una manera realmente eficaz y útil. La transformación de los corredores ferroviarios en corredores multifuncionales que integren otras infraestructuras de conducción de energía y datos; o la creación de un sistema de transporte de mercancías realmente competitivo que sea capaz de absorber de manera sostenible el crecimiento previsto del 30% para 2030 en Europa son asuntos fundamentales no sólo para la captación de fondos europeos, sino para consolidar el liderazgo de la industria ferroviaria española en el escenario internacional.