El viaducto original de Rande, un puente atirantado de 400 metros de extensión, se abrió al tráfico en 1981. Ahora, 40 años después, podemos afirmar que su ampliación es un proyecto de ingeniería único en el mundo. La solución de ampliación estructural ha permitido importantes ahorros económicos y de tiempo de construcción frente a la alternativa de construir un nuevo puente, lo que habría significado, al menos, el doble de inversión y tiempo de construcción. Y, lo que es más importante, la ampliación se llevó a cabo sin interrupciones de tráfico en el puente existente.
La capacidad estructural de los pilonos se verificó para asegurar la viabilidad de la ampliación sin realizar ninguna actuación de refuerzo mayor en la cimentación. De esta forma, la solución estructural para la ampliación aprovechó al máximo las torres principales existentes. Se construyó un nuevo cabecero metálico sobre la parte superior de cada torre, en el que se ancla la nueva familia de tirantes que da soporte a la ampliación del tablero. La ampliación del tablero se materializa con sendas vigas mixtas de sección cajón, ubicadas una a cada lado del tablero actual, y unidas a él mediante vigas transversales en celosía. La unión de estas vigas transversales al tablero existente se lleva a cabo mediante una conexión rotulada, con el propósito de reducir los esfuerzos de interacción entre ambos tableros. De esta manera los trabajos sobre el tablero existente se han limitado a pequeños refuerzos y a las labores de mantenimiento.
Como resultado de la actuación, la capacidad de tráfico global del puente se extendió de cuatro a seis carriles, y la ampliación aprovechó al máximo la estructura existente, que tiene un importante valor patrimonial. El Estuario de Vigo también posee una importante riqueza biológica, por lo que la construcción se aseguró de no afectar al medio ambiente. El trabajo de ampliación se completó en un período récord de 18 meses.
En 2018, el Puente de Rande recibió el Premio Acueducto de Segovia. Obras Públicas y Medio Ambiente 2018 que reconocía a este proyecto por su importancia tecnológica y funcional, su carácter social y cultural, la calidad ambiental y científica de las medidas correctoras proyectadas y sus valores estéticos y paisajísticos, así como la perfección alcanzada en su ejecución.
En 2019, el Comité de la Asociación Internacional de Puentes e Ingeniería Estructural (IABSE) seleccionó el proyecto de ampliación del Puente de Rande en España, como uno de los dos finalistas del premio a la estructura más sobresaliente del año 2019.
En 2020, el colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Galicia ha premiado la actuación de WSP Spain como miembro del equipo participante en el
proyecto de ampliación del Puente de Rande en los premios San Telmo a las actuaciones de ingeniería civil más representativas de Galicia.