El aeropuerto de Palma de Mallorca, ubicado a 8 kilómetros de la ciudad, es la puerta de entrada para millones de turistas que visitan la isla. El tráfico del aeropuerto es fundamentalmente internacional y alcanza sus niveles más altos en la temporada de verano. En 2018, el aeropuerto cerró el año con un total de 29 millones de pasajeros (un 4% más que el año anterior), más de 200,000 operaciones y 10,000 toneladas de mercancías. El proyecto de mejora aumentará la capacidad operativa del aeropuerto, reducirá los retrasos y la congestión del tráfico, y mejorará la seguridad del usuario.
El proyecto liderado por WSP contemplará la mejora, renovación y reorganización del edificio procesador del aeropuerto, los muelles A, C y D y las áreas de estacionamiento y acceso. El área del edificio del procesador se ampliará hacia el norte, aumentando el número de mostradores de facturación existentes a 252.
Además, el sistema de manejo automático de equipaje y los espacios comerciales se ampliarán y renovarán; la planta P30 se reconfigurará; Se crearán nuevos controles de seguridad y se reordenará el flujo de pasajeros.
Este proyecto es una parte importante del programa integral de Aena para modernizar algunas de sus instalaciones aeroportuarias más importantes en España.